Serie: Des-Identidades
Goya, parece ser que pintó a la Duquesa de Alba en dos versiones. Primero desnuda, luego, según algunos dichos, tuvo que "vestirla". No se sabe en verdad que fue lo ocurrido. Es una de las pinturas más famosas del artista, pero sobre la que hay menos información.
Dicho esto, quiero referirme a La Gran Dama, sobre quien también se dicen muchas cosas. Pero soy el único testigo de su verdad.
Podemos vestirla con muchos ropajes, de diferentes épocas sean siglos o milenios, pero siempre seguirá siendo ella. No necesito vestirla para tapar ninguna apariencia, ningún pacatismo, ninguna hipocresía. Es ella, quien es.
La Gran Dama Desnuda, viéndola en presente, alberga a todas las que luchan por lo que se ha dado en llamar una "cuestión de género". Milita en la causa libertaria de opresiones, maltratos e injusticias que este sistema perverso ha instalado como cultura de sexo identificable. Por ello expone su presencia. «Aquí estoy -dice-, pero soy más, mucho más de lo aquí ven. Albergo multitudes».
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